Desayuno entre flores renacentistas

El jardín es un hermoso oasis donde se sirve un desayuno casero rodeado de naturaleza. Los dueños son muy amables y te hacen sentir como en casa.

La habitación, aunque cómoda, tenía algunos muebles un poco desgastados que podrían mejorar la experiencia general.

El jardín con múltiples niveles ofrece un ambiente relajante y muy acogedor.

Lamentablemente, la cama era un poco dura, lo que afectó mi descanso. Además, noté algunos ruidos ocasionales que dificultaban la tranquilidad durante la noche. Por último, aunque el servicio fue muy atento, el estacionamiento podía ser complicado a veces, lo que generaba estrés al llegar.

El desayuno se servía en un hermoso jardín de estilo medieval, rodeado de naturaleza, y los productos eran frescos y caseros, lo que lo hizo realmente especial.

Aunque la habitación era cómoda, me pareció que los muebles estaban algo desgastados, lo cual restó un poco de encanto a la experiencia.

Jardín de múltiples niveles, estacionamiento seguro, accesibilidad a monumentos culturales.

Las habitaciones tienen muebles antiguos que pueden resultar incómodos!!! ¡El olor a humo de cigarrillo en algunas áreas podría mejorarse!!! ¡Los baños son un poco estrechos para quienes buscan más espacio!!! ¡Una mejor información sobre opciones de transporte sería útil!!!

1) Jardín hermoso
2) Dueños amables
3) Desayuno abundante

1) Camas algo duras
2) Ruidos ocasionales

Maravilloso lugar para relajarse en un jardín privado rodeado de naturaleza y encanto, ideal para disfrutar del desayuno al aire libre.

El desayuno era tan variado y sabroso que cada bocado me hacía sentir como un rey en un banquete—¡incluía croissants frescos que caían como una nube de sabor! La decoración de la habitación, con sus muebles antiguos, daba un toque de historia que me transportaba a otra época.

Ruidos ocasionales

Un lugar acogedor en familia

La casa es bellísima y súper amplia, ideal para familias. Nos encantó el desayuno al aire libre, todo fresquito y variado. Los dueños son un amor, siempre atentos y dispuestos a ayudar. Eso sí, el parking puede ser un poco complicado a veces, pero nada grave. Definitivamente un lugar para repetir.

durante mis vacaciones familiares en rávena, la estancia fue maravillosa. el jardín es hermoso y el desayuno incluía croissants recién horneados y aromas orgánicos. los dueños se aseguraron de que tuviéramos todo lo que necesitábamos, haciendo nuestra experiencia aún mejor.

algo ruidoso de vez en cuando.

El jardín con el conejito es una experiencia única. La cama era un poco dura, lo que no fue ideal para descansar bien. En diez minutos caminando llegas a los sitios culturales. Comí en el patio, donde el desayuno incluía deliciosas tartas caseras. Un lugar acogedor y con atención personalizada. Lo recomiendo.

Pero la habitación estaba un poco ruidosa. Las camas eran super cómodas y me encantó el acceso al jardín, donde había un conejo adorable. Además, el desayuno era delicioso, con muchas opciones frescas y variadas.

La ubicación es excelente, cerca del centro histórico y con estacionamiento gratuito a solo unos pasos. La habitación, aunque algo antigua en los muebles, era amplia y cómoda. El baño estaba muy limpio y espacioso. El desayuno incluyó mermeladas orgánicas deliciosas que disfruté mucho, pero algunas áreas del alojamiento necesitan una renovación urgente para mejorar la experiencia.

Maravilloso, maravilloso, maravilloso

Los dueños son unas personas extraordinarias. Nos ayudaron con cada detalle, incluso advirtiéndonos sobre el transporte en la ciudad. La habitación era espaciosa, elegante y muy limpia, ¡perfecta para relajarse después de un día explorando!

totalmente recomendable 💖🌟